Queridos lectores:
Recibid un cordial saludo desde Bosa. Aquí me veis junto a una preciosa pintura mural de Cristo y, con el uniforme de catequista, junto a nuestro obispo, Mons. José Daniel Falla Robles. Éste mi último saludo, para ustedes, desde aquí, pues el año de destino, en las misiones colombianas de mi Congregación, toca ya a su fin. Como veréis, por el peso del documento, ha sido un tiempo lleno de actividad y henchido de actividades.
Noviembre: El sábado día 10 de noviembre, en la casa de los Misioneros de Mariannhill, tuvimos el retiro de los adolescentes y jóvenes de Confirmación
Comenzamos con la dinámica “Nicodemo, de la noche a la luz”, …
… que dio lugar a la adoración eucarística de Jesús resucitado (cuarto momento de la reflexión)…
… y a escenas de gran belleza visual, como cuando todos decidieron acercarse a Jesús.
En la segunda dinámica, “Jesús y la Samaritana junto al pozo de Jacob”, fueron desgranándose los distintos versículos del Evangelio que relatan este acontecimiento, entreverados con oraciones de sanación interior, que fueron tocando los corazones de los participantes.
Tras un momento de oración, la Samaritana (Ángela) fue repartiendo un cántaro vacío, dibujado en un papel, a cada uno de los participantes, para que ellos lo llenaran de todos sus vacíos, miedos, frustraciones, rebeldías, desencantos, limitaciones y pecados. Estos papeles fueron depositados en una vasija, a los pies de Jesús (Harrison), quien fue abrazando, uno tras otro, a cada joven, para que recibieran el abrazo consolador de Dios, a cambio de sus vacíos.
Por la tarde, ya en el templo parroquial, el P. Juanjo celebró, como Misa del retiro, la propia de vísperas de domingo, …
… en cuyo acto penitencial, se quemaron, ante el altar, las tinajas de papel, con todos los vacíos que los participantes, como la samaritana, habían dejado a los pies de Jesús, junto al pozo de Jacob.
Un momento sumamente emotivo fue cuando todos los que no podían comulgar todavía, por no estar bautizados o no haber hecho la Primera Comunión, …
… fueron acercándose a darle un beso a Jesús-Eucaristía, expuesto en el ostensorio parroquial.
El lunes 12 de Noviembre, aprovechando la festividad, tuvimos el “compartir” del equipo de catequistas –la primera vez que nos reuníamos en plan festivo-, …
… que comenzó con una emotiva eucaristía, cuyos acólitos fueron los catequistas más jóvenes (Harrison y Anderson) y los aprendices de catequistas (los niños David, Diana y Tatiana) , …
… que fue tomando un marcado sabor a despedida en todas las intervenciones de los distintos compañeros, lo que casi transformó una Eucaristía festiva en la Ultima Cena,…
… donde, como merecía la ocasión, todos comulgamos bajo las dos especies.
Tras el silencioso almuerzo, hubo una inesperada sesión de canciones de confraternidad y despedida, …
… con emotivos brindis y tarjetón de recuerdo, firmado por todos los asistentes, para terminar con una sesión de cine, visionando, todos juntos, la película “Patch Adams”.
El viernes 16 de Noviembre, los niños de Infancia Misionera y de la banda de la Asociación Mesa de Trabajo UPZ-86, participaron en el acto de inauguración de las luces navideñas del centro comercial “Mi Centro”,…
… con una oración y un villancico, a petición de los administradores del mismo, realizados por los niños de Infancia Misionera.
El sábado 17 de Noviembre, tuvo lugar la Feria-Retiro, de repaso de catequesis y de anuncio kerigmático, con todos los catequistas disfrazados de personajes bíblicos, donde participaron los 210 niños de Bautismo y Primera Comunión, que recibieron, cada uno, una manilla con uno de los colores del parchís, para que se agruparan por esos colores y se formaran cuatro grupos, antes de entrar en el recinto parroquial.
Cada uno de estos grupos fue liderado por uno de los cuatro evangelistas, que llevaban un color coincidente con las manillas de los niños participantes a ellos encomendados: San Lucas (el Ángel – Dña. Hercilia – grupo rojo), …
… San Marcos (el León – Dña. Marlén – grupo amarillo)…
… San Mateo (el Toro – D. Javier – grupo verde),…
… y San Juan (el Águila – Dña. Olga Lucía – grupo azul). Dichos grupos fueron pasando por los cuatro espacios en que estaba dividido el recinto parroquial, según el lema “VAYAMOS AL ENCUENTRO DE JESÚS”, con la apostilla: “Buscaremos a Jesús por diferentes caminos”, en concreto, cuatro caminos:
1.- La “Avenida del Evangelio”, donde les esperaba Moisés (Oswaldo), para hablarles de la Biblia, de los Mandamientos de la Ley de Dios y de la Santa Madre Iglesia, y de la Santísima Trinidad; San Lucas (Dña. Matilde), que les habló de los Evangelios y de las Parábolas, y el sembrador (Dña. Astrid), con la explicación de su parábola.
2.- La “Calle del Perdón”, donde les esperaba un simpático demonio (Claudia), para hablarles de sí mismo, del infierno y la condenación, de las tentaciones y de los diversos tipos de pecado; dos ángeles (Dña. Esperanza y su hija Diana), que les hablaron de sí mismos, del Cielo, el Purgatorio y la salvación, del perdón y la reconciliación; y un Jesús perdonador y abrazador (Wilson), que tomaba las faltas y problemas que los niños llevaban escritos en un papel y los depositaba en un cuenco, para ser quemados por él, liberándolos.
3.- La “Plaza de la Eucaristía”, donde les esperaban, tras la mesa de la Última Cena, Jesús (Valentina) para hablarles de la Última Cena, de la Eucaristía, del ayuno eucarístico, y para partirles el pan, repartirles el vino (zumo de uva) y darles una forma eucarística de papel, sobre la que tenían que escribir su nombre; y la Virgen María (Kelly), que, desde su visión de Madre de Jesús y de la Eucaristía, les explicó cómo debían recibir a su Hijo al acercarse a comulgar.
4.- El “Parque del Templo”, donde les esperaban cuatro monaguillos (Carlos Andrés, Ana María, Tatiana y David), que les guiaron por la exposición sobre los distintos ornamentos y utensilios litúrgicos que se utilizan en el culto, y un sacerdote (P. Juanjo), que les explicó los símbolos del bautismo y los introdujo a la Adoración eucarística y al amor por la Sagrada Eucaristía, que recibirán dentro de unos días, enseñándoles algunas canciones eucarísticas y haciendo la exposición del Santísimo Sacramento en las manos de la imagen de María.
El retiro se cerró con una Eucaristía, donde los niños de Bautismo y Primera Comunión, como todavía no podían comulgar, fueron creando un mural con las formas eucarísticas de papel que recibieron en la “Plaza de la Eucaristía”, en las que iba escrito su nombre, para conformar, con ellas, la silueta del cáliz y la hostia eucarísticos.
Tras la celebración de la Misa del retiro en el templo parroquial, el P. Juanjo salió disparado a celebrar el enlace matrimonial de Harold y Angie Mallerly, en la capilla “Beato Engelmar Unzeitig” de los Misioneros de Mariannhill.
El lunes 21 de Noviembre, el P. Juanjo, junto con su ahijada Karent, fueron invitados a almorzar en casa de la Sra. Maricela, en compañía de otros catequistas.
Ese mismo día, bien lejos de aquí, en Papúa-Nueva Guinea, el P. Marco llegaba a su nueva parroquia en Lae y celebraba su primera Misa para la feligresía, que le daba la bienvenida.
Todavía es sábado 24 de Noviembre, pero, desde que acabó Halloween, ha comenzado a oler a Navidad por todas partes: se decoran las puertas de las casas y de los garajes, se pintan los postes, los bolardos y los bordillos de las aceras con los colores navideños, que aquí son el rojo, el verde y el blanco, y se cubren las fachadas y balconadas con fluctuantes luces de colores.
Durante toda la mañana, el P. Juanjo dirigió el ensayo, primero y último -y general-, de “Las Posadas” o “Novena de aguinaldos”, en ocho cuadros o escenas bíblicas del misterio de Navidad,…
… que los niños de los ocho grupos parroquiales de Bautismo y Primera Comunión habrían de escenificar después, en la tarde, como catequesis de Navidad para sus papás,…
… donde los improvisados actores ensayaron sus guiones con gran ilusión, entusiasmo y nerviosismo, lo mismo que los catequistas responsables de cada grupo, pues quedaban pocas horas para el estreno.
A primera hora de la tarde, en el templo parroquial, las señoras Matilde y Esperanza, asistidas por el P. Juanjo, tuvieron la catequesis para los padres y padrinos de aquellos niños de Primera Comunión que se estaban preparando, también, para el Bautismo.
A continuación, el P. Juanjo salió corriendo hacia la capilla “Beato Engelmar Unzeitig” para celebrar el enlace matrimonial de Bayron Alexander y Jenny Paola, al que asistieron, como damitas de honor, sus cuatro hijas y sus sobrinas.
Y, por último, en la tarde-noche, de nuevo en el templo parroquial, se tuvo la catequesis que los niños de Bautismo y Primera Comunión dieron a sus papás, como broche final de las Catequesis de Padres (ESPAD), en forma de una “Novena de aguinaldos”, que incluía ocho misterios de Navidad, interpretados y rezados por los niños:
Entrada procesional, con música de fondo: “En un mercado persa”, de Albert Ketelbey:
– Fragmento de los camelleros: La estrella de Belén, seguida de los tres Reyes Magos: Melchor a caballo, Gaspar en camello y Baltasar en Elefante.
– Fragmento de los mendigos pidiendo limosna: Los pastores con su rebaño y el perro pastor.
– Fragmento de la princesa buscando a su amado: María embarazada, en la borriquilla, y José llevando la brida.
1.- Primera posada: El ángel Gabriel visita a Zacarías. Grupo de Marlén y Olga Lucía, que se reúne en la parroquia, con niños de 8-10 años de edad, y que entraron cantando “Ángeles de Dios”.
2.- Segunda posada: El ángel Gabriel visita a María. Grupo de Claudia y Diana, que se reúne en Mariannhill, con niños de 8-10 años de edad, y que entraron cantando “Salve Reina y Madre”.
3.- Tercera posada: María visita a Isabel – Nace el Bautista. Grupo de Matilde y Astrid, que se reúne en la parroquia, con niños de 8-13 años de edad, y que entraron cantando “El Tamborilero” (con la letra modificada).
4.- Cuarta posada: Dudas de José y bodas de María y José. Grupo de Esperanza y Juliana, que se reúne en Mariannhill, con niños de 8-13 años de edad, y que entraron cantando “Vamos a preparar el camino del Señor”.
5.- Quinta posada: El edicto del César y viaje hacia Belén. Grupo de Wilson y Anderson, que se reúne en la parroquia, con niños de 10-11 años de edad, y que entraron cantando “Con mi burrito sabanero”.
6.- Sexta posada: Nacimiento del Salvador – La primera Navidad. Grupo de Luisa y Valentina, que se reúne en Mariannhill, con niños de 10-11 años de edad, y que entraron cantando “Noche de paz”.
7.- Séptima posada: Anuncio del ángel y adoración de los pastores. Grupo de Javier y Cielo, que se reúne en la parroquia, con niños de 11-13 años de edad, y que entraron cantando “A Belén Pastores”.
8.- Octava posada: La estrella y la adoración de los Magos. Grupo de Oswaldo y Hercilia, que se reúne en Mariannhill, con niños de 11-13 años de edad, y que entraron cantando “Tutaina”.
Estribillo: “Ven, ven, ven. Ven a nuestras almas, Jesús, ven, ven; ven, ven; ven a nuestras almas; Jesús, ven, ven a nuestras a-a-almas. No-o-o tardes tanto, no tardes tanto, Jesús, ven, ven; ven, ven”.
El domingo 25 de Noviembre, solemnidad de Jesucristo Rey del Universo, tuvo lugar, en la capilla “Beato Engelmar Unzeitig”, el bautismo de varios adultos, que fue administrado por el P. David.
Ese mismo día, en una de las misas parroquiales, nos asistió, por primera vez, un “pollito” de monaguilla, llamado Isabela, de 5 añitos de edad, quien, acompañada por Karen y auxiliada por su hermano Julián, monaguillos experimentados, se puso al servicio del altar con mucha ilusión y muy juiciosita.
Y, ya en la noche, la comunidad se reunió para recibir al P. Wenceslaus (segundo por la derecha), responsable de la Fundación en Colombia, con sede en Roma, por formar parte del Consejo General.
Diciembre: En la mañana del 1 de Diciembre, tuvieron lugar, en ambas sedes parroquiales, las evaluaciones de todos los niños que se estaban preparando a recibir los sacramentos del Bautismo y la Primera Comunión, como paso previo a su aceptación a la recepción de los mismos.
Mientras tanto, en la capilla “Beato Engelmar Unzeitig”, el P. David procedía a dar el sacramento del Bautismo a cuantos jóvenes recibirían después, en la tarde, los sacramentos de la Confirmación y la Primera Comunión, de manos del Sr. Obispo.
Y, ya en la tarde, en el salón de actos del colegio “Fe y Alegría”, tuvo lugar la misa presidida por Mons. José Daniel Falla Robles, obispo de Soacha, y concelebrada por los PP. David y Juanjo, …
… donde recibieron los sacramentos de Confirmación y Primera Comunión, unas ochenta personas, pertenecientes al grupo de adultos y a los tres grupos de jóvenes parroquiales.
El 2 de Diciembre, primer domingo de Adviento, el P. Juanjo posa, tras la misa, con sus monaguillas, a las que conoce desde niñas y a las que, en su momento, dio la Primera Comunión. La segunda por la izquierda, Andrea, fue la primera monaguilla que tuvo en Colombia, entonces una niña y ahora toda una señorita.
A continuación, en la misa de 11:00, presidida por el P. David, los nuevos monaguillos y monaguillas recibieron sus túnicas…
… y los nuevos niños y niñas de Infancia Misionera recibieron con gran ilusión la camiseta, la pañoleta y la argolla, que los identifican como tales. En ambas imágenes, posan con el seminarista Yesid (en el centro), responsable de todos ellos.
Y, ya en la tarde, el P. Juanjo celebró el Bautismo de una niña bien linda, a quien se le puso el nombre de Danna Samara.
El jueves 6 de Diciembre, memoria del obispo San Nicolás –Sancte Nicolaus, que, con el tiempo, devendrá en Santa Claús-, durante la misa matinal, celebramos la décima renovación de votos religiosos de la misionera venezolana sor Rosa María, perteneciente a la Comunidad “María Estrella de la Mañana”, que estaba de paso por nuestra parroquia.
El viernes 7 de Diciembre, tras la misa matinal en la capilla, unas parroquianas le regalaron al P. Juanjo, como recuerdo de su estancia en Colombia, un auténtico sombrero Arahuaco,…
… tribu indígena que habita en la Sierra Nevada del río Magdalena y que pertenece a la gran familia lingüística Chibcha.
Tras la suelta de lámparas voladoras, en el centro comercial “Mi Centro”, ya en la noche, celebramos en comunidad la “Noche de velitas” en honor a la Virgen María, en las vísperas de la solemnidad de su Inmaculada Concepción.
Así lucía, en el centro de Bogotá, capital del país, la plaza de Simón Bolívar, donde está la catedral primada y los principales edificios de gobierno nacional (© Imagen: Bogotá, D.C.).
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El sábado 8 de Diciembre, solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Virgen María, a primera hora de la mañana, tuvo lugar, en ambas sedes parroquiales: Ntra. Sra. de la Natividad (imagen) y la capilla “Beato Engelmar Unzeitig”, la recepción del Bautismo de los niños y niñas,…
… que recibirían después, en la siguiente celebración, junto con un segundo grupo, su Primera Comunión; en total, dos grupos, por celebración, en cada sede.
Y, a media mañana, una segunda celebración de Primera Comunión para los cuatro grupos restantes, dos en cada sede; casi doscientos niños, de ocho grupos, en total.
Las celebraciones parroquiales terminaron siempre con el emotivo acto de consagración de los niños, con sus cirios encendidos, a la Virgen María, en su advocación de Ntra. Sra. de la Natividad, con esta conocida oración: “Oh María, Madre mía, yo me ofrezco del todo a vos y, en prueba de mi filial afecto, os consagro en este día alma, vida y corazón, en una palabra, todo mi ser, y ya que soy todo/a vuestro/a, oh Madre de Bondad, guardadme y defendedme como cosa y posesión vuestra. Amén”.
Al comienzo de la tarde, en los salones de Mariannhill, los niños de Infancia Misionera realizaron, como actividad del día, las típicas coronas de Adviento, cada uno la suya.
Mientras el equipo de catequistas celebraba la última reunión del segundo semestre, esta vez, de evaluación, tras las celebraciones de Bautismos, Confirmaciones y Primeras Comuniones, con la presencia del P. Juanjo, que pospuso, en casi dos semanas, el momento su partida a España para poder organizar y atender dichas celebraciones. En boca de todos, la expresión: “¡¡¡Prueba superada!!!”
Y terminar la jornada, acompañando a sus casas a los catequistas más jóvenes, tras haber tomado, todos juntos, como despedida, el último helado.
El domingo 9 de Diciembre, segundo domingo de Adviento, fue un día de despedidas entre Misas dominicales,…
… como ésta, con la familia de la mayordoma Hilde, en presencia de otras mayordomas (Isabel y Nidia) y algunos catequistas (Ángela y Juliana) y la Sra. Leonarda.
A mediodía del lunes 10 de Diciembre, en medio de la más que desesperada “operación-maleta”, tuve una gratísima sorpresa: los cantos misioneros y el clamor y candor de la inesperada y multitudinaria despedida de algunos de los fieles con los que he trabajado y convivido durante todo este tiempo y en los cuales el Señor se ha volcado, haciendo maravillas, quedando, como a ellos les gusta decir, “bendecidos por el Señor”.
Fue un momento emocionante, entrañable e inolvidable, que todos vivimos entre lágrimas de tristeza por la partida y sonrisas de agradecimiento y alegría por habernos conocido y compartido lo que Dios tenía para darnos… Si la despedida dolió tanto, es porque la convivencia mereció la pena; todos quedamos llenos de la Presencia de ese Dios que compartimos durante más de un año.
Fue, entonces, cuando, arrodillados en plena calle, imploraron les impartiera mi última bendición; algo que hice de corazón y con agrado, pidiéndoles que, también ellos, me bendijeran a mí.
Ya en la tarde, cuando el P. David y D. Oscar, el diácono taxista, me dejaron en el aeropuerto, me esperaba un puñado de personitas queridas, que me hicieron más llevadera la espera y la partida.
Tras un año de misiones en Colombia, ésta es mi última carta desde aquí. Al embarcar, lo pensé. Creo que podría terminarla, diciendo: “Siervo inútil tuyo he sido, Señor, sólo he hecho lo que tenía que hacer”; y creo, además, que podría añadir lo que dijo mi Señor en la cruz: “Todo está cumplido”… aunque, como diría el Abad Francisco Pfanner, nuestro fundador: “Queda tanto por hacer”.
Tras el despegue, sin novedad, se apagaron las luces y, lo mismo que vine, me fui; me queda el recuerdo de tanta gente linda, conocida y querida, tanto bien hecho y recibido, tantos recuerdos vividos y tantas bendiciones compartidas,… y de las luces de Bogotá, perdiéndose en el horizonte, que es lo último que vi.
Gracias a todos ustedes, queridos lectores, por haberme acompañado durante este tiempo con su fidelidad en leer mis cartas y con todas sus oraciones, tanto por mí, como por las obras de evangelización y apostolado que los Misioneros de Mariannhill tenemos en aquellas tierras. Que Dios les bendiga, mucho y siempre, a todos ustedes.
FIN
P. Juan José Cepedano Flórez CMM.
Misionero de Mariannhill.
This entry was posted on martes, enero 8th, 2019 at 10:28 am and is filed under Galeria.
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