
Queridos lectores:
Vuelvo a ponerme en contacto con ustedes para darles a conocer mis andanzas por Colombia. Como pueden apreciar sus mercecitas, por el poncho, la guacamaya y el sombrerico sabanero, me voy adaptando bien a estas tierras colombianas.

Agosto, es, por excelencia, el mes del viento y las cometas, que lucen como vidrieras al contraluz del atardecer, y cuelgan, atrapadas en los cables del tendido, a la luz del amanecer.

Este mes nos trajo algunos cambios importantes dentro de la cotidianidad, ya que, a menos de un mes de mi llegada, el 4 de Agosto, tuvimos que despedir al entrañable Obispo que me recibió en la Diócesis de Soacha cuando llegué, Mons. Daniel Caro Borda, a quien cogí un gran afecto en poco tiempo.

Y, semana y media después, el 15 de Agosto, participé con el P. David, Superior Delegado General de los Misioneros de Mariannhill en Colombia, en la toma de posesión del nuevo Obispo de Soacha, …

… Mons. José Daniel Falla Robles (izda)., a quien tuve el placer de conocer y saludar, así como al Nuncio Apostólico de Su Santidad en Colombia, Mons. Ettore Balestrero (dcha.).

Pero volvamos a la cotidianidad. Quiero presentaros a algunos de los monaguillos y monaguillas que me asisten en las misas dominicales…

… y de diario. Aquí estoy con ellos en la catequesis de monaguillos que tienen los sábados por la tarde. Y, ya que estoy aquí, aprovecho la ocasión para presentaros los distintos grupos de catequesis de Primera Comunión que, separados por edades, se reúnen en ese mismo día, pues los sábados la parroquia desborda de vida parroquial:

Dña. Martha con sus niños de Primera Comunión, que se reúnen en el pasillo lateral existente entre la iglesia y la tapia; …

… Dña. Claudia, con sus niños de Primera Comunión, reunidos en el rincón de la Virgen con el Niño, en la parte de atrás de la iglesia; …

… Dña. Matilde, que también imparte las catequesis bautismales, con sus niños de Primera Comunión, en la nave central de la iglesia; …

… Dña. Hercilia, con sus niños de Primera Comunión, reunidos entre la puerta de entrada al recinto y la de entrada a la iglesia. Como os habréis podido dar cuenta, todos ellos llevan puesta una camiseta naranja, como distintivo de su misión de catequistas, y, estampada en ella, una cruz roja con la palabra “Catequista”; …

… D. Glen, que también da las catequesis de Confirmación, con sus niños de Primera Comunión, en el cobertizo existente detrás de la iglesia, al final del corredor trasero; …

… el presídium de la Legión de María, con sus flamantes chaquetas rojas, que se reúnen en la nave lateral y que estuvo dirigido, en esta ocasión, por Dña. Isabel; …

… y, por último, ya en la tarde-noche, tras la misa parroquial, bien abrigaditos con sus ruanas o ponchos de pelo de llama, entonando sus cantos de alabanza, el más tardío de todos los grupos sabatinos, el de San Juan Bautista, liderado por Dña. Olga, que se reúne en la nave central, al fondo de la iglesia.

A mayores de las confesiones y Misas celebradas a diario en la parroquia, donde se ve palpablemente la acción misericordiosa de Dios en las personas que asisten a ella, tanto de dentro como de fuera de la parroquia, quiero recordar aquéllas que más me marcaron en su momento:

La visita a una clínica del centro de Bogotá para darle la Unción de enfermos y la Primera Comunión a Dña. Nelly, de 45 años, que falleció al mes siguiente. Jamás olvidaré su carita radiante de felicidad. Y, estando allí, la extremaunción a una jovencita de 33 años, llamada Liliana. Después vendrían muchos otros: Manuel, Lola, Isabel, Ana…

La Eucaristía celebrada para los empleados de una fábrica de filtros para automóvil bogotana llamada “Master”, quienes pararon la producción para participar en ella. A pesar de las reticencias iniciales, fue un momento de gran gozo para todos y quedaron deseosos de más.

Y la novena predicada a Nuestra Señora de la Natividad, Patrona y Madre de Mariannhill y Titular de nuestra parroquia, bajo el título “María, silencio y Palabra”, con gran afluencia de fieles, de cerca y de lejos, que disfrutaron con ella y fue motivo de conversiones y gran demanda de confesión.

Y, entre tarea y tarea, Dios permitió que descubriera cosas tan curiosas, como esta blanquísima familia de llamas, muy propia de estas latitudes andinas, …

… o la preciosa vista de la ciudad de Bogotá, hasta donde se pierde la vista, desde la montaña en que se asienta el santuario de Monserrate, donde tuve la suerte de concelebrar la Santa Misa, y que domina la gran ciudad, haciéndonos sentir, a la vez, la grandeza y la pequeñez del ser humano,

… o la diminuta capillita San Juan Pablo II, donde suelo ir a hacer ratitos de adoración y que a mí se me antoja un “Rinconcito de Cielo”, donde el Señor me mira y me bendice a través de la custodia en que se expone la Eucaristía, …

… o el rótulo de la parte superior del espejo panorámico existente en la sacristía de la parroquia Ntra. Sra. de la Salud, que reza: “Esta Es La Persona Más Amada Por Dios”, algo muy reconfortante para mí en aquel momento y para muchos más, a los que puse de penitencia ir a la sacristía y mirarse en el espejo, tras haber leído esta sentencia… ¡Cuántas carencias de cariño auténtico y de auto aceptación descubre uno en las personas! …

… o, incluso, el verme retratado en un espejo abandonado en un vertedero, donde se reflejaba el cielo y yo en él, como una puerta abierta a la eternidad; lo que me llevó a pensar que así hace Dios con nosotros: en mitad de nuestro pecado, el perdón y la gracia.

Y, cambiando de mes, a mayores de las tareas habituales y de las Misas, como ésta dominical en el Patio de Comidas del centro comercial “Mi Centro”, de El Porvenir, con gran afluencia de fieles, …

… o ésta otra en el parking del conjunto residencial “El Jardín”, de El Porvenir, para pedir por los enfermos y ancianos del lugar, …

y de bautismos, como los de un niño ya mayorcito, llamado Daniel, y de otro muy chiquitín, llamado Juan José, -¡qué coincidencia! Un Juan José bautizando a otro Juan José, aunque aquí, de cariño, se nos llame Juanchito-, …

… Septiembre vino marcado por eventos de gran relevancia, tanto a nivel congregacional como parroquial, como el 8 de Septiembre, Fiesta de la Natividad de la Virgen María, Patrona y Madre de Mariannhill y Titular de la parroquia Ntra. Sra. de la Natividad, que administramos los Misioneros de Mariannhill en Bosa-Bogotá.

Como ya es tradicional en nuestra Congregación, en la Eucaristía de ese día, el joven colombiano Carlos Andrés Torres Ledesma, oriundo de la ciudad de Ibagué, capital musical de Colombia, del departamento del Tolima, fue admitido al Postulantado.

Y, finalizada la misa, tuvo lugar, por segundo año consecutivo, la procesión de candelas con la imagen de Nuestra Señora, que recorrió con tranquilidad las vacías calles que circunvalan el templo parroquial, dejando perplejos, por lo desacostumbrada de la escena, a los escasos viandantes que se iba cruzando.

El día 24 de Septiembre, fecha de la beatificación de nuestro hermano de Congregación y Mártir en el Campo de Concentración de Dachau, el P. Engelmar Unzeitig CMM, celebramos una Misa de Vigilia, seguida por una breve Adoración eucarística, donde se meditaron fragmentos de las cartas escritas por el P. Engelmar desde su cautiverio en Dachau, y se concluyó con la proyección de la película “Un amor más fuerte que la muerte”, sobre la vida y muerte del P. Engelmar en el Campo de Concentración de Dachau.

Al día siguiente, 25 de Septiembre, contamos con la presencia del nuevo Obispo de la Diócesis de Soacha, Mons. José Daniel Falla Montes, en la que fue su primera visita a una parroquia de su nueva Diócesis y su primer acto oficial como obispo titular de la misma, …

… quien presidió la solemne Misa de acción de gracias por el nuevo Beato y Mártir de la Iglesia Universal, con gran afluencia de público y la presencia de todos los grupos parroquiales y los equipos de gobierno del barrio, todos ellos con sus respectivos atuendos distintivos, …

… y bendijo la imagen del P. Engelmar que se conserva en la parroquia y, en el ofertorio, una réplica de su uniforme de preso, con el característico triángulo rojo invertido y su número de identificación, el 26.147.

Y por ésta, nada más. Os bendigo y os presento a la Virgen María desde el santuario de Ntra. Sra. de Chiquinquirá, Patrona de Colombia, y a Jesús, desde el santuario del Divino Niño, tan querido por el pueblo colombiano, …

… y, a las puertas ya del mes de Octubre, el mes de las misiones, os dejo con esta catequesis sobre cómo rezar el rosario misionero, que tiene cinco colores, uno por cada continente de la tierra, y pedir, así, con cada misterio, por las tareas de misión que la Iglesia realiza en cada uno de ellos. Gracias por vuestra oración.
FIN
P. Juan José Cepedano Flórez CMM.
Misionero de Mariannhill.
© P. Juan José Cepedano Flórez CMM.